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Niñas, adolescentes y padres, víctimas del ataque del Manchester Arena

La Policía británica considera ‘probable’ que el presunto terrorista no actuara solo

SM.- Las autoridades británicas sospechan que Salman Abedi, el presunto terrorista suicida que mató a 22 personas en el atentado de Mánchester, no actuó solo. Así lo ha declarado la ministra de Interior, Amber Rudd, en declaraciones a la BBC.

«Parece probable, posible, que no hiciera esto solo, así que los servicios de inteligencia y la Policía están siguiendo sus pistas para asegurarse de que tienen toda la información que necesitan para mantenernos seguros», ha declarado Rudd a BBC radio.

La ministra ha reconocido también que Abedi era conocido «hasta cierto punto» por los servicios de inteligencia. «Los servicios de inteligencia conocen a un montón de gente, y eso no significa que vayan a detener a todo el que conocen. Pero es alguien a quien conocían con anterioridad, así que estoy segura que cuando concluya la investigación sabremos más», ha explicado.

Rudd ha lamentado que parte de la información sobre el atentado y sobre Abedi se filtrara desde Estados Unidos antes de que la hicieran pública las propias autoridades británicas.

«Es irritante si (la información) se revela desde otras fuentes, y he sido muy clara con nuestros amigos en que esto no debe volver a ocurrir», ha dicho Rudd.

Pasó por Siria

Este mismo miércoles, sin embargo, Francia, otro aliado con quien Reino Unido comparte información, ha adelantado que Abedi probablemente viajó a Siria tras su paso por Libia.

«Hoy sólo sabemos lo que los investigadores británicos nos han dicho. Que es alguien con nacionalidad británica, de origen libio, que de repente, tras un viaje a Libia y probablemente a Siria, se radicalizó y decidió cometer el atentado», ha explicado el ministro de Interior francés, Gerard Collomb, en una entrevista en un canal de televisión.

Los investigadores creen que Abedi, nacido en Mánchester de padres refugiados libios, se radicalizó tras su viaje a Libia y decidió cometer el atentado.

El grupo yihadista Estado Islámico, que ha reivindicado la acción, ha declarado un «califato» en partes de Irak y Siria y tiene presencia en Libia.

El Gobierno británico decidió este martes elevar el nivel de amenaza terrorista a «crítico», el más alto, lo que supone la posibilidad de otro ataque inminente. Como parte de esta nueva situación de seguridad, el Ejército ayudará a la Policía en labores de vigilancia.

Saffie Rose Roussos, de tan solo 8 años

«Todos los actos terroristas son ataques cobardes contra inocentes, pero este destaca por su atroz y nauseabunda violencia por dirigirse contra jóvenes que estaban disfrutando de una de las mejores noches de su vida». Así se expresaba la primera ministra británica, Theresa May, en su primera comparecencia pública tras el atentado de Mánchester que costó la vida a 22 personas.

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Muchas de ellas, en efecto, y también muchos de los 59 heridos, eran menores, sobre todo niñas, adolescentes y jóvenes que habían acudido con la ilusión de ver a su ídolo, Ariana Grande. También padres que asistían con sus hijos o les esperaban en el vestíbulo, donde el terrorista suicida, identificado como Salman Abedi, de 22 años, hizo estallar su bomba.

Conforme avanza la identificación y la comunicación a las familias, vamos conociendo sus nombres, origen e historias.

La prensa británica contrapone en sus portadas dos imágenes: una en la que identifican a Salman Abedi, el presunto terrorista, y la de Saffie Rose Roussos, su víctima más joven, de tan sólo 8 años.

Oriunda de Lancashire, había acudido al concierto con su madre, Lisa.

El director de la escuela primaria a la que asistía la menor, Chris Upton, la ha descrito como «simplemente una maravillosa niña pequeña» en una declaración. «La quería todo el mundo. Su calidez y amabilidad se recordarán con cariño. Saffie era callada y modesta, con un toque creativo», ha comentado Upton, que ha calificado su muerte de «tremenda conmoción».

Georgina Callander, 18

Estudiante de 18 años, el fallecimiento de Callander fue confirmado por el Runshaw College, el centro de educación superior al que asistía.

«Nuestro más sentido pésame, pensamientos y plegarias se dirigen hacia la familia de Georgina, sus amigos y todos aquellos afectados por esta pérdida», ha declarado un portavoz del centro. El diario local Manchester Evening News ha recaudado cerca de 200.000 libras (230.000 euros) en una campaña a través de internet para ayudar a la familia de Callander.

Kelly Brewster, 32, murió protegiendo a su sobrina

La familia de Kelly Brewster, de 32 años, también la daba por desaparecida hasta que ha confirmado su muerte. Brewster fue al concierto acompañando a su sobrina, de 11 años, y según relata la BBC murió protegiendo a la niña de la explosión.

El Reino Unido ha identificado por el momento a otros dos de sus ciudadanos entre las víctimas mortales: Olivia Campbell, de 15 años, cuyos padres colgaron su foto en redes sociales con la esperanza de encontrarla; y John Atkinson, de 28.

Una pareja polaca que recogía a sus hijas

En el momento de la explosión, en la entrada al Mánchester Arena que comunica con la estación de trenes de Victoria se arremolinaban los padres que esperaba para recoger a sus hijos tras el concierto. Entre ellos, una pareja polaca que murió en la explosión, según ha confirmado el Ministerio de Exteriores polaco. Los hijos están bien.

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