La normativa determinará que los alumnos que terminen la ESO, cuenten con un nivel B1 de valenciano, y que los que terminen el Bachillerato, tendrán acreditado un nivel B2 de valenciano.
Para la pausa entre las pruebas hay que llevar comida y agua, y llevar ropa de abrigo, ya que las puertas y ventanas abiertas permanecerán abiertas