DEPORTES MOTOR

Épico Fernando Alonso en su octavo podio del año

Fernando Alonso, podio en el GP de Bahrein de F1 en su primera carrera con Aston Martin/DZAN
Fernando Alonso, podio en el GP de Bahrein de F1 en su primera carrera con Aston Martin/DZAN

El español, tercero, resiste 16 vueltas al Red Bull de Checo Pérez en un final de fotofinish. Victoria de Verstappen

Domingo, 05. 11. 23

REDACCIÓN informaValencia.com

Fue un final de película y una carrera para recordar. Fernando Alonso volvió a emocionar, a recordar el titán que siempre fue en un gran premio espectacular que se resolvió en fotofinish de ciclismo. El octavo podio del español en 2023 llegó después de una respuesta épica, aguantando al Red Bull de Checo Pérez cuando no hay salida en el callejón, en el tramo final, donde se ve la personalidad. Verstappen ganó, pero el foco está hoy en Alonso.

Dieciocho años después de subir a un país en su coche, de levantar un deporte hacia el infinito, de un campeonato del mundo, Alonso lo vuelve a hacer en Brasil. Su talento genético y esa voluntad inquebrantable lo encumbran al podio más emocionante, solo 53 milésimas, nada, menos de un suspiro. Un premio que se vio perdido ante la superioridad mecánica del Red Bull, pero que se mantuvo vivo porque en la F1 no solo cuenta el coche. El piloto lo es todo.

Salieron fatal los dos Aston Martin, Stroll y Alonso, y pasaron como centellas en la primera curva Norris y Hamilton. Por detrás el látigo. Magnussen y Albon se tocan, los dos destrozan sus coches (Haas y Williams), Piastri daña su McLaren y el coche de seguridad inevitable termina en bandera roja. Hay que reparar las vallas en aras de la seguridad. Y media hora después, se celebra otra salida.

En el segundo asalto Verstappen toma la delantera, Norris se ciñe a su cintura y los dos establecen el status quo que dominará la carrera durante 71 vueltas. Por detrás, la igualdad regala una carrera amena y placentera.

Fernando Alonso convierte la intuición en sabiduría, y la determinación en ardor guerrero. Especialista en primeras vueltas desde que era un rayo en la salidas con aquel Renault azul, el español se lanza a la conquista de sus ambiciones.

En la recta de acceso a la curva 4 Alonso, que no ha realizado una gran salida, da cuenta de Hamilton. Una pasada con lija para el piloto de Mercedes que expresa la mejoría en Brasil de Aston Martin. Con un coche competitivo, Alonso es una amenaza para cualquiera.

Loading...

Ubicado en la tercera posición, el asturiano modera su tercer puesto como si de oro vivo se tratase. Como no puede acercarse a Norris, menos a Verstappen, mide la carrera con la inteligencia de las centésimas. Procura que nadie se acerque a su Aston Martin para evitar el DRS (el alerón trasero abierto a menos de un segundo del rival que aporta muchas más velocidad).

Ritmo demoledor

Su ritmo es demoledor en ese momento mientras realiza la operación más triste que se recuerda en la Fórmula 1 actual: gestionar los neumáticos, lograr que no se desgasten, conceder centésimas de segundo a cambio de no parar en el garaje para sustituir ruedas.

Por detrás hay batalla. Los dos Mercedes están en una crisis institucional, peleado Russell con sus directores porque no le dejan superar a Hamilton. Checo Pérez remonta y sobrepasa a los Mercedes. También Carlos Sainz, consistente en su ritmo. Y por allí aparece Lance Stroll, el compañero de Alonso, con un gran cadencia de velocidad.

El octavo podio de Alonso choca contra un Red Bull, el de Checo Pérez. Pero el mexicano no es Verstappen y gracias a eso el español consigue mantener la posición, defenderla tanto en la pista como en la segunda parada en el garaje.

Alonso es duro como el pedernal y exprime todas las posibilidades del circuito para alejar a Checo. En la vuelta 55, el mexicano consigue al fin menos de un segundo de distancia, activa el DRS en las dos zonas habilitadas y se dispone a pasar.

El español se defiende con agallas y conocimiento. Entra más lento en las curvas y sale con muchas más velocidad en la recta que desemboca en la 4, donde Checo no llega nunca a tirar el coche.

La película se repite una vuelta detrás de otra, Checo se acerca en la recta de meta, pero no sale con velocidad en las curvas. Y, una tras otra, Alonso se protege como un león, sin consentir que el mexicano se acerque. Una pelea hermosa que se traslada hasta el final, 16 vueltas heroicas, defensa numantina, que depara una última vuelta para el recuerdo.

Pérez pasa al fin a Alonso en la penúltima vuelta, pero el español no cede. Muerde al mexicano, se pega como una lapa, no cede su sueño. Y en la última vuelta le devuelve el mordisco. Ahora activa él el DRS y en la curva 4 adelanta al azteca. Con los dos pilotos desbocados, se llega a la recta final.

Un esprint de ciclismo, rueda con rueda, un coche junto a otro, dos gladiadores en acción. Gana Alonso por 53 milésimas, en el mismo segundo, con golpe de riñón. Épico.

Agregar comentario

Haga clic aquí para publicar un comentario

Campo de Golf El Castillejo, Alcalá de la Selva