Rosa Muriel /ASĂ ES LA VIDA
24-06-2020
Buscar siempre mĂĄs motivos que excusas. No precipitarse, pero no tener miedo a avanzar. Compartir ideas, experiencias, momentos. Compartir vida.
No intentar nunca poseer al otro, no restarle espacio, no cambiar sus gustos, consiste sobre todo en ser libre. Alguien con quien disfrutar de un silencio y con quien dormir tranquilo. Alguien a quien llamar cuando consigues un ascenso y con quien llorar cuando te comunican un despido.
Un valiente.
Confiar sin reservas, sin traiciones, sin temores, es fundamentalmente la ausencia de mentiras. Alguien que te impulse a cumplir tus sueños y que te preste su abrazo en las noches de pesadillas.
Un apoyo.
Alguien que te saque de tus casillas, que bromee contigo, que se rĂa con tus manĂas, pero que te quiera con todo eso. Las cosquillas a las 12 de la mañana de un domingo cualquiera, un paseo un jueves por la tarde, dos manos entrelazadas huyendo del frĂo, dos cuerpos desnudos ahorrando calefacciĂłn.
El campo en el que te criaste y la historia de aquel diente que te rompiste por temerario.
Un soñador.
El olor del pelo reciĂ©n lavado cuando te abrazan por detrĂĄs. Un mensaje de buenos dĂas. Un deseo de buenas noches.
Es debatir, decidir y discutir⊠reconciliarse.
Viajar solo y echar de menos, viajar en pareja y no echar de mås. Disfrutar del tiempo individual. Mandar canciones y hacer planes.
Un incondicional.
Que siempre sea la alegrĂa y nunca la pena. Que uno mĂĄs uno siempre sean dos, que se convierta en suma, pero nunca reste.
Un beso cĂĄlido en una nariz helada, uno apasionadoâŠ
Si no es amor no lo quiero.
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