El viejo profesor

¿QUÉ TENDRÍAMOS QUE HACER?

La pubertad se presenta muchas veces para padres y para hijos como una etapa abrupta y
llena de sorpresas. Para hacer de ella un momento rico en oportunidades educativas y potenciar el crecimiento y madurez de los hijos es necesario conocer las características, procesos y riesgos a los que nos enfrentamos. Acompañarles en esta empresa se torna indispensable.

[mks_dropcap style=»square» size=»41″ bg_color=»#8bc34a» txt_color=»#ffffff»]L[/mks_dropcap]
a adolescencia es una etapa conflictiva, también para los padres; debemos prepararnos para afrontarla. El paso de la niñez a la adolescencia nos desconcierta. De repente, nuestro hijo es otro, se transforma, nos sigue pareciendo un niño, pero quiere salir con sus amigos, ¡sin nosotros!; se viste y se arregla ‘a su estilo’, un estilo que nos espanta; le gusta encerrarse en su cuarto y escuchar música a todo volumen o permanecer tumbado, totalmente inactivo o viendo la televisión durante horas, enganchado al móvil o chateando por Internet sin parar. Apenas nos dirige la palabra, toma decisiones que no coinciden con nuestras expectativas, toda la familia pasa a un segundo plano, a menudo nos trata despectivamente o nos contesta mal, no colabora, se cree que estamos para servirle …

[mks_dropcap style=»square» size=»41″ bg_color=»#8bc34a» txt_color=»#ffffff»]S[/mks_dropcap]us cambios de humor nos sorprenden. No se aguanta ni a sí mismo; en poco tiempo, pasa de un estado depresivo a la euforia; puede ser introvertido y extrovertido a la vez, dependiendo de con quién esté; pasa de contarnos todo a no dirigirnos la palabra; se nos pegará como una lapa a ratos, y en otros momentos no querrá ni saludarnos … Necesita nuestro apoyo, nuestros consejos, nuestra exigencia, pero aparentemente los rechaza: argumenta que le parece ridículo lo que le decimos. En esta etapa busca nuestra aprobación, pero hará como si le pareciera irrelevante.

[mks_dropcap style=»square» size=»41″ bg_color=»#8bc34a» txt_color=»#ffffff»]A[/mks_dropcap]nte sus cambios y contradicciones no sabemos cómo actuar, nos sentimos desconcertados, sorprendidos, llenos de dudas y en ocasiones hasta culpables: ¿Está bien que se aísle o deberíamos obligarle a estar con nosotros? ¿Por qué se ha convertido nuestra vida en una batalla continua? ¿Por qué se porta así? ¿Qué hemos hecho mal? Y, sobre todo, ¿qué tendríamos que hacer?

Agregar comentario

Haga clic aquí para publicar un comentario

Campo de Golf El Castillejo, Alcalá de la Selva