LA GENTE MALA NO ES FELIZ

Mía Teresa

Me ha costado mucho admitir que hay gente mala.

Siempre he intentado encontrar una explicación, una excusa, un motivo, un porqué… Pero no, con todo el dolor de mi corazón he de admitir que «haberlos haylos».

Y hoy he llegado a la conclusión de que la gente mala no es feliz. Es como que tienen que alimentarse del dolor que provocan a los demás. Nunca tienen suficiente. Pueden ir a la cabeza de la carrera pero, al volver la mirada, tienen que ver al resto de los corredores arrastrándose en el lodo para poder disfrutar de sus triunfos.

Loading...

¿Y qué podemos hacer nosotros como educadores para evitar que algunos de nuestros alumnos acaben pensando así?

Desde mi humilde opinión, creo que debemos focalizar nuestro empeño en la FELICIDAD.

Transmitirles que quizás lo más importante no vaya a ser que lleguen primero si, para ello, van a tener que dejar mucho o a muchos en el camino. Convencerlos de que quizás vayan a ser mucho más felices levantando al que ha caído, dando la mano al que se la está pidiendo, sonriendo al que se ha rendido, alegrándose por el que sigue esforzándose… En definitiva, llegar a la meta valorando más la canción alegre del bombeo de sus corazones que el puesto que hayan conseguido.

Porque la vida es un CAMINO, no una CARRERA.

Be the first to comment on "LA GENTE MALA NO ES FELIZ"

Leave a comment

Your email address will not be published.