El Jamelgo
«Son las diez de la noche, ¿sabes dónde están tus hijos?»
Era lo único que decía el anuncio (de los llamados anuncios de servicio público) en las televisiones norteamericanas. Vamos a darle un poco de vidilla ya que estamos en España y es veranete: pongamos las doce, la una, las dos…lo que ustedes consideren. Los padres soltamos a los hijos en las localidades de veraneo, muchas veces sólo intuyendo el dónde, el cuándo y el con quién.
Los niños son intrépidos, traviesos, cabroncetes…pero inocentones. No es culpa suya, la edad no da para más. Pero en esas zonas turísticas, de segundas residencias y demás; máxime en días de fiestas que el alcohol y los estimulantes riegan los cerebros vía los estómagos. Los lobos enfermizos, adulterados, babosos y babeantes acechan.Nos sobran los ejemplos. Cuidado: den la libertad que estimen oportuna, pero no pierdan de vista a los cachorros, ellos tienen el derecho a que ustedes les protejan y ustedes la sagrada obligación de hacerlo.
SON LAS DIEZ DE LA NOCHE, ¿SABES DÓNDE ESTÁN TUS HIJOS?
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