La pirotecnia de Altura ofrece un disparo atronador con apoteosis final que deslumbra en la plaza
-«¡Ché, nano, quina bestialitat!»… Es la frase más repetida al finalizar el grandioso espectáculo de Zarzoso. La Plaza del Ayuntamiento de Valencia ha ensordecido este miércoles de Plantà con la potencia que ha imprimido la Pirotecnia Zarzoso a la mascletà con la que ha conquistado la presencia de cientos de miles de personas que se ha reunido para disfrutar del disparo.
La tercera generación de la pirotecnia de la que son copropietarios los hermanos Antonio, Jesica y Chelo Zarzoso, ha diseñado un disparo con su sello característico de trueno fuerte y mucha potencia. Así lo ha reconocido Antonio Zarzoso, que ha mostrado su satisfacción por cómo había ido el disparo cuando ha subido al balcón para saludar al público y recibir el tradicional reconocimiento del público. El pirotécnico ha asegurado que ha salido como esperaban y ha aplaudido que el «día ha acompañado, el airecillo también ha estado muy bien y el público, genial, como siempre».
Con una carga de material reglamentado de más de 198 kilos y poco más de seis minutos de duración, la mascletà de Zarzoso ha arrancado con tres principios aéreos, con los que ya ha desvelado lo que iba a venir. Un pequeño digital antes de entrar en la mascletà con cinco fases de retenciones de menor a mayor ha dado paso a un terremoto con retenciones «que también ha ido calentando en truenos y sonido», para llegar al bombardeo y la «apoteosis final», con la que han llenado de estruendo toda la plaza.
Según Cruz Roja, hoy han sido atendidas 37 personas (31 por lipotimias) y dos han tenido que ser evacuadas, una por fractura de cadera y otra por problema coronario junto a una lipotimia.
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