El Cardenal Cañizares preside en la Catedral la misa de acción de gracias por los 25 años de su ordenación episcopal
El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, dijo sentirse con “la misma ilusión” que hace 25 años, cuando fue ordenado obispo, y renovó su “promesa de fidelidad y de comunión sin fisuras” al papa Francisco.
El papa Francisco agradeció al cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, su trayectoria con elogiosas palabras, en el 25 aniversario de su ordenación como obispo. «Enseñas prudentemente al pueblo lo que antes has aprendido de Dios en la plegaria, realizando asiduamente la visita pastoral y otras labores pastorales y confiándote piadosamente al seguro refugio de la Madre de Dios invocada como Nuestra Señora de los Desamparados».
En una carta de felicitación con motivo de la conmemoración de esos 25 años de legado y que fue leída en la Catedral, Francisco agradece al cardenal Cañizares su «celo apostólico e imperturbable laboriosidad a favor del pueblo de Dios en un largo y variado ministerio».
En la misiva, el Pontífice también ha resaltado su «preocupación por la transmisión de la catequesis con atención a las circunstancias propias de nuestra época», según ha informado el Arzobispado en un comunicado.
El escrito, leído públicamente al término de la eucaristía conmemorativa por el canciller secretario del Arzobispado, destaca del purpurado su «trabajo para que los fieles asignados a tu cuidado pastoral, siempre de mejor forma, alabaran a Dios, participasen en la Eucaristía y recibieran los restantes sacramentos con provecho espiritual».
Asimismo, el Papa recuerda en su carta las sucesivas etapas del cardenal Cañizares como obispo en las diócesis de Ávila, Granada, Toledo y actualmente en Valencia, para la que Francisco le nombró arzobispo estimando su «fervor apostólico y habilidad en la gestión».
De esta forma, el Pontífice ha resaltado su «singular pericia y diligencia en funciones de gran importancia en los dicasterios de la Curia Romana en la Conferencia Episcopal de España, trabajando con solicitud por el bien de la Iglesia» y de su «amada patria española».
Fidelidad al Papa
Por su parte, Cañizares aseguró su empeño de trabajar para «los últimos, los que sufren, los pobres, los desheredados de la tierra» y destacó algunas figuras importantes en su ministerio episcopal, entre ellas los tres últimos papas.
De Juan Pablo II explicó que le ayudó a descubrir que «el camino de la Iglesia es el hombre» y que «la Iglesia por encima de todo es misión». De Benedicto XVI ha resaltado su enseñanza de que «solo Dios» es quien salva y colma los anhelos del hombre. Y de Francisco dijo que es «un nuevo san Francisco de Asís» y ha subrayado su ejemplo de «misericordia con los demás».
Mención a Adolfo Suárez
El arzobispo de Valencia recordó también a otras personas que han marcado su trayectoria vital. A su madre, que le aconsejaba que se dejara ayudar por Dios; al sacerdote de su pueblo José Martínez, cuyo ejemplo fue decisivo en su intención de ser ordenado presbítero; a su hermano Jerónimo, del que ha recordado su testimonio de fe en su lecho de muerte; así como a Adolfo Suárez, quien fue presidente del Gobierno y de quien ha elogiado su esfuerzo por lograr la concordia en España. Asimismo, reconoció la fuerte impronta en su espiritualidad de santos como Teresa de Jesús o los arzobispos de Valencia Tomás de Villanueva y Juan de Ribera. Recordó, además, a los también arzobispos valentinos José María García Lahiguera, por difundir la santidad sacerdotal, y a Miguel Roca Cabanellas, que fue quien le comunicó que el Papa le iba a nombrar obispo hace 25 años.
El cardenal Cañizares pidió a los presentes en la misa de acción de gracias que recen por él y, a su vez, ha prometido su oración por toda la archidiócesis de Valencia. Recordando su lema episcopal, ‘Fiat voluntas tua’ (Hágase tu voluntad), pidió en particular oraciones para que pueda seguir siempre los designios de Dios. “Que pueda dejarme conducir por Él, para no obstaculizar nunca sus planes”, ha manifestado.
Durante la misa de acción de gracias, el obispo auxiliar de Valencia monseñor Esteban Escudero comunicó al Cardenal el regalo de parte de toda la archidiócesis de Valencia de una réplica del Santo Cáliz de la Última Cena que se venera en la propia Seo. Asimismo, el canciller-secretario del Arzobispado, José Francisco Castelló, leyó una carta del papa Francisco al cardenal Cañizares con motivo de sus bodas de plata episcopales.
La ceremonia, en la que participaron cientos de fieles, responsables de organismos diocesanos y familiares del Cardenal, así como la Escolanía de la Virgen y el coro del Seminario Mayor para los cantos litúrgicos, finalizó con el himno de la Coronación de la Virgen de los Desamparados. Para la celebración, la imagen procesional de la patrona de Valencia fue entronizada en el presbiterio de la Seo y, al término de la misa, fue devuelta de nuevo a su basílica. El cardenal Cañizares aseguró que la Mare de Déu “me ha acompañado siempre durante toda mi trayectoria como obispo”.
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